21 noviembre 2024
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En pleno Valle de Traslasierra, en Córdoba, a casi mil kilómetros del mar, un sector de un museo privado evoca a la Armada Argentina.

La propuesta, sorprendente para muchos turistas y hasta vecinos del lugar, forma parte en realidad del Museo de Municiones de Mina Clavero, que en diciembre inauguró una segunda sala dedicada a “la Marina”, con objetos e historias ligadas al océano.

El museo, por su singularidad, seguramente integraría cualquier lista de los 10 más extraños en Córdoba.

“En realidad, por lo primero que muchos se sorprenden es porque existe un museo de municiones. Y, una vez adentro, ahora también sorprende que tan lejos del mar haya dos salas dedicadas a la Armada”, reconoce Héctor Radicci, un cordobés de 49 años que hace ocho creó esta muestra permanente en Mina Clavero.

En su paso por la Marina, entre los 15 y los 19 años, Radicci adquirió su pasión por lo militar marítimo y por la causa de Malvinas.

El frente del museo, como un homenaje callado, luce una ilustración con el mapa de las islas del sur del Atlántico. Una vez adentro, se acumulan las referencias a la guerra de 1982. Es la parte que más emociona a los turistas que visitan el espacio.

Primero y único

“Este es el primer y único museo de municiones de América latina, estamos muy orgullosos porque se ha hecho a pulmón, con mucho esfuerzo, sin apoyo oficial y con la colaboración de muchos amigos y conocidos” , resume el propietario, que hace 22 años llegó a Mina Clavero para trabajar en un hotel.

Hoy, Radicci se dedica junto con su familia a la atención de la muestra.

El particular museo se inauguró en 2011 con una sala de 50 metros cuadrados, que reunía unos mil objetos. “Pensamos que iba a alcanzar y sobrar, pero superó las expectativas”, comenta ahora.

“Empecé mi colección con 33 cartuchos, abrí el museo con unas mil piezas, y ahora hay más de cinco mil”, cuenta. Radicci aclara que los objetos expuestos son donados por personas o instituciones que confían en su emprendimiento.

Escuelas y delegaciones educativas visitan el lugar durante todo el año.

“Promover la paz”

“Una vez me dijeron que coleccionara objetos bélicos, porque lo de las armas es un tema como tabú. Pero nuestro objetivo es concientizar sobre la necesidad de la paz, aunque parezca contradictorio. Cada pieza tiene una historia, no está porque sí, si la gente escucha lo comprende y lo acepta bien”, sostiene el hombre que se encarga, además y con su esposa, de guiar a los visitantes.

“Viene mucho la gente a la que le gusta el tema, que conoce de armas, pero todas las personas en general se terminan interesando por algunas piezas o temas de la exposición; como por caso la temática de Malvinas”, expone.

Radicci se vincula constantemente con los centros de veteranos de Malvinas de la región de Traslasierra y de otros puntos del país. “Hay una parte en donde exponemos las gorras que nos dejan los excombatientes, muchos vienen y se emocionan por encontrarse aquí con este espacio”, cuenta.

Armada en las Sierras

“De las tres fuerzas militares de nuestro país, la única que ayuda con material de rezago es la Armada”, explica Radicci sobre la posibilidad de sumar objetos a su colección.

“Hay piezas únicas, que no se verán en ningún otro lugar del país, como un cañón de desembarco del año 1897”, marca sobre algunos elementos de valor histórico.

Los espacios dedicados al mar y a “la Marina” contienen municiones navales, objetos diversos y un modelo a escala del buque Ara General Belgrano, hundido durante la Guerra de Malvinas, en 1982. El que se muestra fue construido por modelistas navales de Capital Federal.

Recientemente, el espacio sumó también una biblioteca de textos afines a la muestra.

El museo de Mina Clavero está abierto al público de 8 a 14, de lunes a lunes.

La entrada cuesta 150 pesos, pero baja a 75 para jubilados y no pagan los menores de 12 años.

Fuente: La Voz