Compartir la noticia:
Jonathan Stobbia oriundo de Hernando, enfrentó en su último desafío el Monte Denali, en Alaska.
El Monte Denali o Monte McKinley es la montaña más alta de América del Norte, con una altitud de 6.190 metros sobre el nivel del mar, está situado en Alaska.
El Hernandense cumplió con el nuevo desafío de hacer flamear la bandera rindiendo homenaje a los veteranos de Malvinas, como en todos sus ascensos anteriores.
Semanas atrás logró anotar en su lista el Monte Denali, muy cerca del polo norte, a 320 km: “Esta fue una de las más difíciles, debiendo enfrentar 35 grados bajo cero y vientos de más de 50km por hora el día que alcance la cima”.
El Monte Elbrús, conocido por ser el el techo de Europa, fue su anterior objetivo. Pero seguido a eso le diagnosticaron problemas cardíacos y debió apartarse de la actividad por un tiempo.
“Me detectaron una arritmia y me dijeron que nunca más iba a poder hacer deportes, estuve dos años sin hacer nada. Volví a principio de año a entrenar y 6 meses después se dio la oportunidad en el Monte Denali”.
En el mes de marzo de este año se confirmó la apertura del Parque Denali. Se organizo el viaje en medio de la pandemia. “En Junio conseguimos la habilitación de guarda-parques teníamos que arribar en avioneta, aunque estuvimos más de tres días intentando llegar al campo base, las condiciones climáticas no lo permitían, pero lo logramos.”
“Ninguno nos conocíamos. Solo el organizador nos conocía cada uno. Fuimos 4 argentinos, un chileno y un mexicano deportista de élite ciego.”
La excursión está planeada para realizarla entre 15 y 17 días. Por motivos de clima se extendió a 24 días arriba de la montaña. Este ascenso se transita entre glaciares y nieve, la amplitud térmica va desde los 0° hasta los -20 grados si hay viento. Pero si sale el sol la temperatura sube a 20° o más.
LA FOTO QUE NO PUDO SER
“La foto es un pendiente que me quedaron el Denali porque el día de la cumbre fue muy duro. En las últimas cuatro horas se levanto viento y la temperatura alcanzó -35 grados. Eso nos hizo complicada la llegada y estadía en la cumbre. Estuvimos no más de 8 minutos. Intentamos sacar fotos y videos del momento pero la temperatura complicó las baterías de los aparatos. Pero ahí estaba la bandera que llevo a todos lados, una insignia, es una identificación. Si bien la foto no salió, la bandera estuvo ahí.
El estandarte del montañista es un regalo que le hizo un excombatiente de Hernando.
